-Título original: The hound of the Baskervilles
-Autor: Sir Arthur Conan Doyle
-Traductor: Enrique Campbell
-Año de publicación: Esta edición en 1999. No he logrado averiguar cuándo se publicó la primera edición es España
-Año de publicación original: Entre 1901 y 1902, a través de entregas mensuales en la revista "The Strand Magazine". Publicada posteriormente como novela en 1902
-Número de páginas: 218
-Reseña:

El caso empieza tras la llegada de un médico de las afueras, quien informa a los protagonistas de la muerte de Charles Baskerville, quien murió en extrañas condiciones fuera de su casa, sin tener daños en el cuerpo. El señor Mortimer les explica la leyenda que lleva consigo ese apellido, pues desde hace más de 100 años, tras el mal comportamiento de Hugo Baskerville, un sabueso infernal acosa a los miembros de la familia, provocando la muerte de todo hombre. En el páramo en donde se encuentra la mansión familiar, se avivó la tenebrosa leyenda tras oír por las noches extraños sonidos en el valle y, más aún. después de la muerte del señor Baskerville.
Mortimer les pide que investiguen la muerte de Charles, así como proteger al último pariente vivo, Enrique, que llegaría de Estados Unidos en breve, para ocupar la mansión familiar.
Tras la llegada de Enrique a Londres, Holmes empieza la investigación, dándose cuenta de que hay alguien siguiendo al señor Baskerville, así como la extraña carta amenazante que éste recibió y la desaparición de una de sus botas.
Sherlock Holmes decide, finalmente, que él no acompañará a su cliente, mandando a encargarse de protegerlo y cuidarlo al señor Watson.
Watson investiga el lugar y va manteniendo informado a Holmes mediante cartas. En el páramo conoce a los señores Stapleton, quiénes rápidamente hacen amistad con Watson y Baskerville. También al extraño matrimonio que se encarga de cuidar la casa, los señores Barrymore. Además, un asesino anda suelto por las inmediaciones.
En varias ocasiones, tanto Watson como Baskerville, fueron presas del pánico al oír extraños aullidos pertenecientes a algún animal, haciendo florecer el temor de Enrique hacia la posibilidad de que la macabra leyenda que recorre su familia sea cierta.
Tras algunas semanas, Watson empieza a atar cabos, descubriendo que Charles estaba citado con una mujer el día de su muerte. Tras ir a visitarla, no saca demasiado en claro.
Mientras, Holmes aparece en Dartmoor con el caso ya resuelto gracias a sus minuciosas investigaciones y los informes de Watson. Finalmente resolviendo el caso, demostrando que no era algo paranormal, sino que había un asesino detrás de las muertes.
Esta novela fue pensado en un principio como un relato de terror, sin la aparición del famoso detective, sin embargo, acabó siendo una de las historias más famosas de la saga de Sherlock Holmes.
El terror de esta historia está presente en los personajes, así como en la leyenda del sabueso venido del averno, con la única misión de castigar los crímenes cometidos por Hugo Baskerville, teniendo desde entonces toda su estirpe una trágica y extraña muerte. El miedo que se va apoderando de los protagonista se va haciendo notar más con el paso de los capítulos.
En la historia, la presencia de Holmes se limita a los primero y últimos capítulos, teniendo más protagonismo su compañero Watson, que es quien vigila e investiga el lugar, asegurándose también de que Enrique Baskerville no vaya nunca solo por el páramo tras ponerse el sol, pues es cuando se producen las muertes en su familia.
El misterio está presente desde el primer capítulo, lo que te lleva a querer acabar la historia para conocer la verdad tras este misterio, pues puedes imaginar que no hay nada paranormal detrás de la leyenda, no obstante, en ningún momento se llega a saber qué es. Holmes solo llega a explicar la muerte de Charles y el casi asesinato de Enrique, pues era la misma persona detrás de estas atrocidades.
El lenguaje se hace algo pesado, pues es una novela de más de un siglo de antigüedad, por lo que su vocabulario, sus expresiones y formas de hablar difieren con las actuales, lo que en ocasiones llega a complicar la lectura. También ralentiza la lectura que los capítulos y párrafos sean largos.